Ocuparse de los drogadictos, ayudarles a encontrar una personalidad perdida, darles el gusto de amar y de trabajar, es el cometido que Engelmajer se ha propuesto desde hace mucho tiempo. En el marco de 80 diferentes lugares de vida, extendidos por toda Europa, entre los que podemos citar el de la Boére en Saint-Paul-Sûr-Save en el Languedoc francés, donde empezó su labor, viven las correspondientes comunidades de tóxicos de los cuales más de un 80 % tienen la certeza de curarse y de reinsertarse. En un bello libro lleno de calor humano y de pasión, que se vive y se lee como una novela,Le Patriarche cuenta su experiencia, sus luchas y da la esperanza a las familias, a los jóvenes y a todos los que se han visto afectados por este problema.
Tapa blanda, 330 pág. en buen estado. Planeta, 1985.