es una manifestación plástica del funcionamiento alterado de una mente introvertida de un hombre culto, misántropo y misógino, que, solamente al decidirse establecer un contacto con las personas, los objetos, los animales, los elementos naturales y la palabra escrita del libro del Génesis, llega a vislumbrar el sentido que puede tener toda existencia. Las personas constituyen un trinomio dialéctico: ella es una muchacha, extraña montañesa con antiguos deslices, con la que el protagonista hiló al azar una conversación en una carnicería de la ciudad, primer contacto que conducirá a ambos a una amistad íntima en la montaña, en las cabañas aisladas que ella habita con su padre y un hijo anónimo. Mich, un borrachín hijo de familia rica, acusado de fratricidio, al que fortuitamente encontró borracho el protagonista a la puerta de su propio apartamento, huye a la montaña perseguido por la policía y buscando refugio en su amigo protagonista que le ofrece escondite. Mich llega a instalarse definitivamente entre la muchacha y el protagonista al que termina por desplazar. El protagonista, después de su experimento de un año de duración, vuelve solitario a su apartamento de la ciudad con un cúmulo de recuerdos vivos y el libro del Génesis que ella le regaló.
Tapa blanda, 215 pág. buen estado. Barral,1967